Gobierno prevé recaudar más de u$s 2.400 millones con privatización de Eletrobras
El gobierno federal brasileño prevé una recaudación de 7.700 millones de reales (u$s 2.483 millones) con el proceso de privatización de Eletrobras, dijo este viernes (20) el ministro interino de Minas y Energía, Paulo Pedrosa, al participar en un debate sobre la estatal en la Federación de las Industrias del Estado de São Paulo (Fiesp).
El dinero entraría al Tesoro en 2018 con el pago por parte de Eletrobras de un bono a cambio de contratos más ventajosos para sus hidroeléctricas. La estatal deberá obtener el dinero para el pago haciendo una oferta de acciones que reducirá la participación del Estado a una cuota minoritaria en la empresa.
Los recursos de privatizaciones deben ayudar al gobierno federal a intentar cumplir con sus metas presupuestarias. Según Pedrosa, los planes para la privatización prevén también límites a la participación de inversores en Eletrobras.
“Estamos invirtiendo (en la idea de privatización) para traer resultado y crear una corporación con una limitación, en la que ningún accionista tenga más del 10 por ciento del bloque de control, una empresa con lógica privada”, dijo Pedrosa.
El director general de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel), Romeu Rufino, también presente en el debate, dijo que para el órgano regulador es indiferente si una empresa como Eletrobras tiene control estatal o privado, pero subrayó que las ineficiencias de la compañía en los últimos años años han castigado a los consumidores con costos más elevados.
“El grupo Eletrobras asumió compromisos que no consiguió cumplir, por varias dificultades. Tanto en el segmento de transmisión como en el de generación, convivimos con retrasos que no fueron indiferentes para el sector como un todo, principalmente para el consumidor. Afectó al consumidor de forma significativa y eso no puede continuar “, dijo.
También defendió la venta de las distribuidoras de electricidad de Eletrobras como una cuestión esencial para la propia supervivencia de esas empresas, que son responsables de la atención a Estados del Norte y Nordeste y enfrentan pesados y recurrentes perjuicios.
El gobierno prevé concluir todo el proceso de privatización de la eléctrica federal hasta el final del primer semestre de 2018.